El lunes 28 de abril de 2025, un apagón masivo dejó sin suministro eléctrico a millones de personas en España, Portugal, Andorra y partes del sur de Francia, marcando uno de los incidentes energéticos más graves en la historia reciente de Europa.
¿Qué ocurrió?
A las 12:32 (hora local), una fuerte oscilación en los flujos de potencia provocó la desconexión automática de la red eléctrica ibérica del sistema europeo, desencadenando un "cero energético" que colapsó el equilibrio entre generación y demanda . El fenómeno afectó infraestructuras críticas: trenes, metros, semáforos, aeropuertos y sistemas de pago electrónico dejaron de funcionar. Ciudades como Madrid, Barcelona, Lisboa y Sevilla quedaron paralizadas durante horas .
¿Qué se sabe sobre las causas?
Las causas exactas aún se investigan. Red Eléctrica de España y REN (Portugal) apuntaron inicialmente a un desequilibrio técnico en la red . REN también sugirió que un incendio en el sur de Francia podría haber dañado una línea de alta tensión entre Perpiñán y Narbona, aunque esta versión fue desmentida por la operadora francesa RTE .
Otra hipótesis, respaldada por REN, plantea que un fenómeno atmosférico inusual —una "vibración inducida" por variaciones térmicas— habría provocado el fallo . Sin embargo, el meteorólogo Mario Picazo descartó esta teoría, señalando la ausencia de condiciones meteorológicas extremas .
También se consideró la posibilidad de un ciberataque, pero tanto el Centro Nacional de Inteligencia español como autoridades europeas descartaron esta opción por falta de evidencia .
¿Cómo se gestionó la emergencia?
Red Eléctrica activó un plan de reposición basado en la reconexión progresiva de grupos de generación, priorizando zonas estratégicas como el norte y sur peninsular . Se estimó que la recuperación total del servicio tomaría entre seis y diez horas .
En Portugal, REN reactivó las centrales de Castelo de Bode y Tapada do Outeiro, enfocándose en abastecer hospitales, aeropuertos y servicios esenciales . Francia, por su parte, movilizó equipos de emergencia y aportó hasta 950 megavatios para apoyar la recuperación .
Impacto en la población y servicios
El apagón afectó gravemente al transporte ferroviario: Adif suspendió todos los servicios de media y larga distancia, y se habilitaron estaciones como Madrid y Barcelona para alojar a los pasajeros varados . Los aeropuertos operaron con generadores, aunque con reducciones de hasta un 30% en vuelos. Las redes móviles y los pagos electrónicos también sufrieron interrupciones.
Las islas Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla no se vieron afectadas, ya que operan con sistemas eléctricos independientes .
¿Qué sigue?
El presidente español, Pedro Sánchez, convocó al Consejo de Seguridad Nacional para coordinar la respuesta y evaluar las causas . Mientras tanto, la Comisión Europea y los operadores eléctricos de Francia, España y Portugal continúan investigando el incidente.Wikipedia, la enciclopedia libre
Este apagón ha puesto en evidencia la vulnerabilidad de las redes eléctricas interconectadas y la necesidad de reforzar los protocolos de resiliencia ante eventos inesperados.